Se nos ha olvidado respirar
- Macarena Chavez
- Dec 7, 2018
- 2 min read
Updated: Dec 10, 2018
Como seres humanos nos es posible dejar de comer, beber o dormir por varios días; sin embargo no podemos dejar de respirar por más de 4 minutos sin que haya un efecto adverso en el organismo. Desafortunadamente, es por esa misma razón que nuestra respiración se ha convertido en algo tan monótono que hemos deja de hacerlo de manera consciente, es decir, vivimos solo por vivir, respiramos solo por respirar. No prestamos atención a tan maravillosa actividad, misma que no solo nos permite seguir viviendo, sino que si la llevamos a cabo de manera consciente recibiremos un sin número de beneficios, algunos de ellos ya por todos conocidos.
Es increíble la relación tan estrecha que existe entre la actividad de respirar y la velocidad a la cual funciona nuestro metabolismo. Así que a respirar y quemar calorías! Dudosamente nos ponemos a reflexionar en el hecho de que por ejemplo cuando salimos de vacaciones solemos comer en cantidades más variadas y abundantes en comparación a nuestra rutina normal y aun así hemos regresado con algunos kilos de menos. Aún cuando parezca un tanto insólito, la perdida de peso tiene su razón de ser. El mero hecho de estar de vacaciones nos relaja, por lo que nuestro sistema parasimpatico se dispara (el estado de felicidad). “Nuestra actitud mental hace cambiar nuestro metabolismo en un grado tal que podemos comer más y, aún así, bajar de peso.” Hace algún tiempo fui de paseo a la Isla del Padre, TX y no me cuidé en lo absoluto en la comida, olvidé mis buenos hábitos alimenticios y disfrute de todo tipo de comida. Ya de regreso en mi casa me subí a la báscula y cuál fue mi sorpresa al ver que había bajado 4 libras.
Relajémonos y bajemos de peso ya que con el mero hecho de respirar estamos creando una combustión interna y de esta manera estamos quemando calorías y acelerando nuestro metabolismo.
Hagamos de nuestra hora de comer todo un ritual. Comamos en un ambiente tranquilo, relajado, es decir, un ambiente que invite a ingerir nuestros alimentos de una manera lenta y en plena conciencia. De esta manera, le estamos dando a nuestro cuerpo el tiempo y la calidad para que inicie positivamente el proceso de digestión.
“Si toma el desayuno en cinco minutos, haga que sean 10 minutos. Si normalmente toma 10 minutos, auméntelos a 15 ó 20.
• Dése a sí mismo al menos 30 minutos para el almuerzo y la cena. Trate de ver si puede aumentarlo a una hora.
• Reorganice sus horarios en la casa y en el trabajo lo mejor que pueda para darse más tiempo a sí mismo. Piense seriamente en cómo encontrar estos momentos extras.
• En la medida de sus posibilidades, haga que sus familiares, compañeros de trabajo y jefes también busquen más tiempo y relajación con las comidas. Búsquese un “compañero en la dieta del sosiego” para que se ayuden uno a otro.
• Coma solamente sentado. No responda al teléfono celular ni al de la casa ni al del trabajo, ni al buscapersonas, ni al correo electrónico, y no haga ningún tipo de trabajo mientras come.”
Excerpt From
La dieta del sosiego
Marc David
https://itunes.apple.com/us/book/la-dieta-del-sosiego/id1249487580?mt=11
This material may be protected by copyright.
Comments